lunes, diciembre 31, 2012

Recuento 2012

Vaya! Un post apresurado (que raro), sobre todo por lo que fue este año 2012. Y creo que como es éste post de apresurado, así fue todo el año. Casi no tuve tiempo de nada y como siempre, me dejé las cosas importantes para atender las urgentes.

Las cosas importantes, la mayoría de ellas no corresponden a mi propia persona, si no a mis familiares. Como este año al parecer estuvo tranquilo en todos ellos, incluyendo a mi novia, entonces ahora me dediqué a atender las cosas urgentes y sin importancia pero que si no se atendían no habría oportunidad de luego poner atención a las importantes para el próximo año.

La cosa urgente fue sin duda en el trabajo. Ya no estoy tratando con la burocracia recalcitrante ni en su mayoría con los queretanos lentos que están como peces en agua evitando chamba con el justificante de que así lo marca la metodología. Ahora estoy más en comunicación con españoles y gringos y al fin ya estamos trabajando casi como se debe sin perder tiempo en documentos ni vistos buenos. Es por ello que eso me exige más el no quedarme atrás a nivel internacional ya que, sin quererlo, se me estaba pegando algo de la mediocridad regional.

Es por eso que en este año no pude ver todas las películas que quise, ni leer todos los libros que me gustaban ni ver las series de televisión que me llamaban la atención. Todo fue trabajo y trabajo.

Lo que sí es que en este año, sólo por ver que mis roomies se alocaron en comprar casa, igual pensé las cosas y me decidí en comprar también un departamentito. Al final, todos estos años engañándome a quedarme en pueblétaro sólo me ha costado el pagar renta por más de 4 años. Sobre todo porque ahora sí el trabajo es más interesante por lo antes expuesto, igual me decidí a comprare un departamentito para ya no pagar renta.

En Junio fue que comencé a preguntar por los departamentos, sobre todo para localizar una ubicación que me agradara, evitándome los puntos que veo que se perfilan a tener mayor tránsito vehicular y, si ya no estoy en chilangititlán, pues evito a toda costa la aglomeración de carros. El departamento  me lo entregaron en Septiembre y aún no me cambio, ya que no me pienso cambiar hasta que estén la mayoría de los muebles para que pueda poder vivir como debe ser. Al parecer esto será a más tardar la tercera semana de Enero. Sólo así me meto ya con los muebles que compre en estos 4 meses (sala, comedor, centro de entretenimiento, cocina integral, refrigerador, estufa, lavadora, recámara y los adornos de decoración, protección y pintura).

Bueno, fue un año ocupado pero estable. Ya me hacía falta un año así con ésta estabilidad, pero para el próximo tendré dos alternativas. Dar mensualidades al depa para que así no esté pagando sólo los intereses y pueda terminar de pagar al menos antes de que salga el nuevo presidente (en 5 años quiero liquidarlo) o ya ver ahora comprar un carro porque el mío ya no lo puedo sacar a carretera con la confianza que necesito.

Para finalizar, y como esto es de prisa. Sólo pondré hoy mi top en película, libro y música. Ya saben que no necesariamente lo que pongo aquí es lo que salió en este año, sólo lo que yo descubrí y me gusto de las pocas cosas que pude conocer nuevas.


Para mí, la mejor película del año fue:

“Life of Pi”



El mejor libro que leí fue:

“Cuentos completos I. Isaac Asimov”



Mejor canción:

“On the radio. Regina Spektor”


domingo, octubre 14, 2012

Retos.

Quizá sea un individuo muy infeliz. Aquellos que me siguen en twitter o facebook pueden ver que parece que nunca hago un comentario de felicidad como la mayoría; no sé si sea porque quieran compartir su estado de ánimo cuando están alegres o sólo para presumir que a pesar de sus carencias, son las personas más felices del  mundo. Tanto que pueden tomar fotografías a un simple plato de comida, a unos zapatos o para verse “in”, a su vaso de café sobrevaluado de starbucks.
 
Puede ser que tenga envidia de cómo es que con tan pocas cosas alguien puede ser feliz, o al menos darle alegría. Sobre todo me refiero a cosas que al final son materiales. Es decir, si tengo hambre, pues me voy a un lugar y compro comida y me la como. Finalmente si presumo mi comida, no fue algo que yo hice, si no que simplemente me lo compré. Al igual que el café, unos zapatos, una corbata. Claro, si a mi juicio me compro, por ejemplo, un helado que por sus características es especial, ya sea por sabor, presentación o color, es cuando me darían ganas de compartirlo. Pero si es un helado común que se compra en cualquier lado, no le veo caso que lo compartan y diciendo que son felices por comprar algo.
 
De igual forma con otras redes sociales como el foursquare, los check-in que doy  son de lugares que me gustan o que estaré un rato o para compartirles por dónde ando, pero se me hace muy chafa cuando, con tal de subir su marcador, den check-in en tienditas cualquiera (como oxxo o una de la esquina). ¿Tan necesitados de atención están para decir a todo mundo que fueron a un oxxo como cualquier otro, a recargar 20 pesos de tiempo aire?
 
Es por eso que yo estoy lejos de ser feliz. Banalidades como esas se me hacen sin chiste lo que a cualquiera es algo que hizo en su día y fue muy feliz. Yo voy a oxxos a cada rato y no lo siento como una experiencia grandiosa como para compartirla.
 
Fuera de las redes sociales, desafortunadamente me pasa lo mismo. Hace poco platicaba con un viejo amigo en donde casi llevamos los mismos estudios académicos. Yo pensaba que por todo lo que pasamos y por lo que somos estaríamos más consientes y no nos dejáramos llevar por el futbol, la música banda y las lavadas de cerebro que hacen los de Recusos Humanos en la empresa. Pero veo que mi amigo ya se acopló a un ritmo de vida lento y con pocas aspiraciones como lo está la mayoría. Ya no pueden ver más allá de un trabajo y de otros lugares mucho mejores. Están en la comodidad de su zona de confort pero tratando de verse aventurados se proponen sus “retos” para sentir que su vida tiene un objetivo o emoción.
 
Me dá risa lo que ya consideran como “retos”. En este caso en concreto, mi amigo con la emoción y convencido dice que tiene un reto muy importantes para su vida, éste reto trata de llevar un proyectillo pequeño de desarrollo de software con toda la gestión y asignación de personal. Según él, se siente “comprometido” y “dará lo mejor de sí para cumplir el objetivo”. Esas son frases textuales que se pueden encontrar en cualquier manual de inducción a los recursos nuevos hecho por el departamento de Recursos Humanos. En pocas palabras, le lavan el cerebro.
 
Lo malo es que este tipo de pensamiento hace que la gente sólo esté en el nivel más bajo de su potencial, sólo para hacer lo requerido por la empresa y seguramente por algún jefe que con seguridad no ha de ser el más inteligente. Yo eso ya lo he tenido desde hace años atrás, es más, desde la universidad uno ya lleva este tipo de responsabilidades y sin ningún problema las cumplimos (si no, no hubiéramos terminado la universidad).

Para mí, un reto está muy lejos de lo que la gente común cree y que lo saque de sus libritos chafas de superación personal.  Un verdadero reto es algo que verdaderamente ayude a la humanidad a dar un pequeño paso en su evolución. Un reto es descubrir algo que para todos es casi desconocido, es ayudar a acabar con la pobreza aunque sea de una región, es curar una enfermedad, es encontrar soluciones más simples a lo que hoy en día se tiene. 

Llevar un proyectillo, hacer una manualidad, hacer tu trabajo, para mí son sólo las tareas, obligaciones, los deberes que todos debemos hacer, así como en la escuela primaria las tareas, se deben hacer porque cualquiera las puede hacer. Y aquel que en su trabajo tenga mucho ego y diga que nadie puede suplantarlo, pues es eso, ego nada más.

Yo creo que hago mis tareas y obligaciones bien. Pero estoy lejos de creerme mucho y mucho  menos me siento “feliz” porque no he hecho muchos retos. ¿Qué será mejor, entrar en la media donde uno es mediocre pero muy feliz para presumir que voy a un oxxo o tengo un proyectillo en el trabajo, o trabajar mucho para ayudar a la humanidad con el alto riesgo de no cumplir algún objetivo de esa magnitud en su vida, pero al menos intentarlo?


miércoles, agosto 22, 2012

La primera.

No sé si este tema ya lo he tocado con anterioridad, es muy probable ya que es una parte esencial de mi vida y de lo que soy ahora. Tengo algunas teorías que seguro generan polémica cada que las expongo, en las borracheras siempre me niegan mis argumentos pero creo que es porque no les gusta saber la verdad, pero hay algunos que se quedan callados pensativos y en ellos creo que también aplica y no se niegan a lo que  puede ser un verdadero sentir.

Todos tenemos un primer amor, pero no me refiero a aquel esporádico primer beso o aquella primera(o) noviecita(o) que pensabas por un día que la querías y al siguiente ya no la soportabas. Me refiero al primer amor real, al que después de algunas novias llegó ésta y sí te mueve todo tu mundo y en cada momento piensas y vives por ella.

En mi caso, ese amor me tocó desde la secundaria y es de esas personas que llegaron para quedarse siempre en alguna parte de tu mente. Quizá también sea alguna parte obsesiva de mi mente y que alguien sano olvida ese tipo de cosas al pasar el tiempo. Yo en cambio no puedo olvidar aquellos momentos en los que estuve al menos platicando con ella, aquel primer beso apasionado con ella dentro del metro o aquella noche en la madrugada sobre el cofre de un auto y debajo de las estrellas donde sólo con besarnos el tiempo parecía detenerse, que todo a nuestro alrededor dejara de existir y sólo quedara esa sensación de estar disfrutando con ella al sentir su piel y su respiración cálida tan cerca de mi.

Mi teoría que al menos yo lo acepto de manera personal es que, todos los hombres tenemos un primer amor así; y aunque al final vengan más mujeres después de esa y que luego nos volvamos a enamorar y casarnos y formar una familia, al final a ese primer amor siempre existe muy frecuente en nuestra mente y nunca la olvidarás hasta el día de tu muerte.

Esto creo que no aplica a las mujeres ya que ellas no pueden llegar a enamorarse a ese grado con alguien que concideren el primero ya que al conocer a alguien nuevo, al final terminan enamorarse de más o igual que los anteriores.

Creo que hasta se podría acabar las infidelidades si los hombres se hubieran quedado con su primer amor ya que no se necesitarían ojos ni pensamientos ni sentimientos para alguien más. Pero desafortunadamente las mujeres no aprovechan esto y al buscar siempre la mejor opción, se van con alguien más que ya tuvo su primer amor y por tanto nunca podrán ser su centro del universo.

En mi caso, ella decidió irse con alguien que le parecía tener “mejor” futuro, alguien que tenía los recursos suficientes como para traer un Chrysler Spirit del año (93’) a andar conmigo que era pobre y no tenía nada de nada que ofrecerle. Solo mi amor en esta vida.

Como era lógico me dolió tanto que pasé por una etapa muy deprimente, ya no puedo decir que es muy triste porque ahora ya sé que hay cosas mucho peores. Mi único refugio que me quedaba fue el estudio, la trataba de olvidar metiéndome como maníaco a estudiar y sobre todo por la escuela (la Batiz) que es muy exigente. Es por eso que salí más o menos bien y adquiría conocimiento para tratar de olvidarla. Gracias a ella soy lo que soy ahora, pero el objetivo no se cumplió. Día tras día la recordaba, creo que sólo la semana cuando falló el trasplante de riñón de mi novia fue la única en la que no la recordé.

Después de seis años de no verla,  la busqué sólo para saber algo de ella. Se había casado con el wey del Spirit 93’ y ya tenía un hijo (curiosamente le puso mi nombre) . Tenía una papelería y no puedo decir que se veía feliz, pero al menos ella tenía ya algo y yo seguía sin tener nada, aún no había terminado la universidad y por tanto lo único con lo que contaba eran el dinero de las becas. Me despedí como tratando de dejar todo ese pensamiento con ella sabiendo que a futuro era muy poco probable que la volvería a ver.

Doce años más tarde llegó Facebook a sus manos, y me busco, y me encontró. Ví su invitación, al ver su nombre completo no pude evitar sentir esa marejada de sensaciones que provocaron sudor, escalofríos y que mi corazón palpitara con mucha celeridad. Esperé un rato para ponerme algo coherente y para que mi cerebro no notara tanta desesperación de mi corazón por darle click a ese botón de aceptar. Al final, después de un respiro que me pareció una eternidad y recordar aquella noche bajo las estrellas, acepté su invitación.

Chateamos muy poco, me comentó que se había divorciado, pero que ahora está con alguien más. Pero igual no está muy agusto, que tiene 4 hijos y que según ella, se sigue acordando mucho de mi. Quedamos de vernos un sábado, pero al parecer mi mente y mis nervios se vieron sobrepasados y mi cuerpo decidió enfermarse de gripa, tan fuerte que estuve todo un mes como zombie por esa gripota.

Un par de meses después volvimos a quedar para vernos. En sus fotos sabía que había engordado ya que utilizaba el truco de que solo sale su cara, no ha dejado de ser guapa. Contuve todos mis nervios y me dí valor para verla nuevamente en persona, en un café en Plaza Inn, llegó y al parecer mantuve la seriedad requerida. Al menos no me le abalancé a abrazarla y sentirla nuevamente cerca de mi (que no quiere decir que no tenía ganas).

Me relajé más porque ví que a pesar de seguir guapa, no era tan guapa como con algunas de las mujeres los que he andado. Creo que sí comprendió que quizá, sólo quizá, existió la posibilidad de que  conmigo estuviera mejor. Pero al final, al despedirnos (porque su esposo la regaña si no atiende a sus hijos) me hizo una pregunta que me dejó sin habla. La pregunta fue

-¿Y dime, tu qué consideras que yo soy para tí? 

Pinches preguntas que se les ocurre a las mujeres que vienen a destruir la cordura, lógica y compostura de mis plácidas neuronas! No podía contestarle que por ella soy prácticamente todo lo que soy ahora, que por ella estudié mucho, y de ahí derivó todo lo que soy. Que cada día de todos estos años la recuerdo y que siempre me pongo dos borracheras obligatorias al año, una en conmemoración en aquella noche cuando nos besamos y la otra el día de su cumpleaños cuando la descubrí con el wey que prefirió sobre mi. Que ella está hasta en todos mis passwords… No, no le podía contestar eso, me limité a decirle

-“Una buen amiga que extrañaba mucho y que ahora no quiero perder el contacto nunca”

Lógicamente no dejaré a mi novia por ella, pero creo que tampoco me limitaré tanto en ver hasta dónde llega este nuevo reencuentro.


domingo, junio 17, 2012

Enemigos.

Creo que es parte natural de la vida de toda persona en tener enemigos. Aunque debe ser mejor tener más amigos que enemigos. Quizá conforme uno crece y hace más cosas de las que el promedio de la gente evita es cuando te vas formando de más y más enemigos. De eso debemos estar todos consientes.

Procuro evitar siempre hacer cosas que puedan dañar directamente a la demás gente. Pero existe otro tipo de gente, y que una gran parte de los mexicanos actúa así, que cuando ven a alguien superior o que está saliendo del hoyo es cuando la empiezan a  atacar y para ellos se convierte de inmediato en su enemigo. Esa es la gente con la que me he topado a lo largo de mi vida. Pero no comprende que para yo salir del promedio y salir poco a poco del hoyo debo esforzarme mucho más. Algo que también una gran parte de la gente se niega a hacer (y por eso luego van a votar por candidatos que les dicen mentiras de salidas fáciles y sin hacer nada… pero ese es otro tema).

Cuando uno estudia en la escuela primaria, te consideras amigos de todos. Todo mundo te habla, con todos juegas y con todos compartes. Pero conforme uno crece las amistades se vuelven más selectas a tus propios gustos y opiniones. Empiezas a formar algo de enemigos. En esos niveles de la primaria y secundaria, no existe esas enemistades por ser superior intelectualmente. Pero sí recuerdo que las únicas enemistades eran cuando ya existía de por medio una mujer. Entonces es ahí cuando tienes tus primeras peleas y verdaderos enemigos simplemente por un arranque de hormonas para demostrar que uno es el macho alfa. Pendejadas al fin y al cabo, pero ahí es cuando se tienen enemigos reales.

En el nivel medio superior, se hace más competitivo la capacidad mental. Sobre todo en las escuelas muy exigentes como en las que fui, una vez que ya se realizó la gran depuración de gente que no está tan capacitada. Se puede llegar a tener “enemigos” para ver quién es el mejor. Eso implica mucho más esfuerzo y es la competencia sana e idónea para el progreso individual y por la humanidad. Demostrar que se es mejor y estar consciente de que tu enemigo es el que te impulsa a ser mejor porque no te vas a dejar que te gane. En el nivel medio superior y superior, al ser de los mejores, siempre me medía con la capacidad de alguien dos años mayor que yo,  tiempo después confirmé que a él también yo le podía causar miedo ya que era su única competencia clara.

Ese tipo de enemistad en el fondo no lo es y es que al final, mi “enemigo” de capacidad mental siempre ha sido uno de mis grandes amigos. Después de tanto tiempo aun salimos a emborracharnos sabiendo que los dos somos los mejores y que es difícil que alguien más nos supere en nuestro propio ámbito en el que no desarrollamos. Venga de la escuela que venga (bueno, al final, alguien del MIT sí nos podría hacer competencia).

Pero hubo otro enemigo. Surgen sólo por la envidia y es gente con complejos de inferioridad y les nace mucho odio hacia su objetivo. Esto me pasó en la Universidad, hubo alguien que venía de otra escuela y tenía odio a los que veníamos de “La Batiz” por el simple hecho de que al entrar a cualquier universidad del país, todas las materias físico-matemáticas nos da risa y resolvemos las ecuaciones de la forma más sencilla y ya sin estudiar porque eso ya lo hemos cursado y hemos vividos problemas mucho mayores de lo que pueden poner en las universidades. Eso es lo que le daba coraje a este tipo, que me imagino que él se esforzaba tanto para alcanzar calificación justo para pasar la materia y nosotros en el desmadre, sin estudiar tanto, sacábamos calificaciones excelentes.

Este tipo me tomó a mi como su enemigo. La verdad yo nunca lo consideré mi enemigo, siempre le ayudaba y comenzamos a hacer trabajo en equipo juntos, hasta hice el Trabajo terminal con él para la titulación (Es como la Tesis pero llevada a la forma práctica). Creo que él solo estuvo en mi equipo para poder aprender de mí estudiar la posibilidad de poder ganarme. Jamás pudo.

Al salir a trabajar, llegó al banco, hace unos 8 años. Yo ya tenía el reconocimiento de la mayoría que trabajaba ahí y pues le volvió el coraje al ver que igual con mi desmadre era de los más respetados y aclamados de sistemas. Pero el acabose fue que, llegó en el momento menos indicado. Fue a unos meses antes en que me le declarara a mi novia, él se le declaro días antes y lo rechazó. Yo no lo sabía ya que no me hablaba mucho y yo no tenía mucho tiempo para salir con todos los amigos para ver sus intenciones. Días después yo me le declaré y aceptó. Imaginen lo que debió sentir, su peor enemigo, aquel que no se esforzaba tanto en estudiar, aquel que le ganó en todo, también la había ganado a un amor, a una mujer.

Me dejó de hablar. Yo ni supe exactamente el día en que renunció, según por un mejor trabajo. Pero tiempo después nos reunimos en una borrachera, esa fue de esas que hasta parecen grupos de apoyo. Me enteré que también mi otro amigo, con el que hicimos el trabajo terminal (fuimos tres en el equipo) también le había bajado a una vieja güera pero gorda y hasta ese momento nos sabíamos que también la quería. Lloró, quería golpearnos y sobre todo, quería destruir mi carro (un shadow) porque alegaba que por eso mi novia me prefirió a mí que a él. Sobre todo porque sabía que, para ese entonces, me conocían varias amantes.

Ese fue el último día que lo ví. Supe que, si su odio irracional crecía, podría llegar a hacer cosas peores y mejor me desaparezco de su vida para que pueda hacer la suya en paz sin ningún recuerdo de su enemigo.

Tiempo después, cuando estaba en Europa, supe que su mamá había muerto de cáncer. Mes y medio después también falleció su papá. A mí me daba tristeza, mucha, yo nunca lo consideré mi enemigo y él sabía que con cualquier cosa lo podría ayudar,  pero no pude hablarle por teléfono porque no sabía cómo reaccionaría en esos momentos más difíciles que se presentan en la vida.

El año pasado, me enteré que efectivamente tiene problemas con los nervios, no sabe manejar mucho la presión y por lo pesado que es a veces nuestro trabajo, él no aguanto y tuvo parálisis muscular incluyendo el corazón. Otro poco se muere. Yo avisé a los que éramos sus amigos más cercanos para que lo fuerana ver porque ya sin padres habría que ayudarlo. Yo evité ir, además que no tenía mucho dinero por pagar le trasplante de mi novia,  no quería que sus nervios se le alteraban al verme. Ya no sabía gran cosa con su vida pero sí sabía que estaba solo.

Afortunadamente no fue así. Me enteré que su hermano siempre estuvo con él, y además tenía una nueva novia. Ella lo ama y todo ese tiempo cuidó de él. Aguantó la rehabilitación y siempre lo animó. Lo extraño fue que mi amigo era ateo y se burlaba que yo y los demás creíamos en Dios. Ahora, su novia es cristiana y lo convirtió también al cristianismo, pero al final esas son pequeñeces. Lo importante es que en febrero me invitaron a su boda.

Me dio gusto verlo recuperado, con su familia y mucha gente que lo quiere. Su novia feliz y creo que es un gran complemento de él ya que tolera y realiza las cosas juntos. He ido a varias bodas, mas de las que he querido, pero la mayoría siempre veía en sus caras el que sólo cumplían con esa obligación social o porque ya no les quedó de otra que casarse. A ellos los ví como deberían verse la gente sencilla y que ha pasado muchas dificultades. Verdaderamente felices.

No sé si al final superó lo que consideró como ofensas de mí para él, o si en verdad siempre me consideró su amigo. Pero quizá también fue su demostración de que, puede ser, me haya ganado en lo que al fin es lo más importante: el ser feliz en la vida. Y pues sí, se lo otorgo, creo que es muy difícil que yo alguna vez tenga eso que ví contigo y tu esposa. Total comprensión y apoyo de alguien.

Y me da mucho gusto…


domingo, marzo 04, 2012

Trabajo en equipo.

Desde que cursábamos los primeros años de la escuela siempre nos han dejado trabajo en equipo. Todos los niveles educativos tienen siempre que ver con algo relacionado a realizar el trabajo en equipo y siempre estaba en contra porque al final, como buenos mexicanos, no se comprometían y abandonaban el trabajo o al final quedaba hecho un desastre.

Los trabajos en equipo en la secundaria fueron los mejores, porque más allá de trabajar todos los días en algún proyecto, nos dedicábamos a echar desmadre, jugar botella y todo eso que los pubertos calenturientos hacen. Solo a un par de días antes de la fecha de entrega es cuando trabajábamos bien y sorprendentemente las cosas salían muy bien. Recibíamos muchas felicitaciones por nuestra “dedicación” pero creo que en todos teníamos potencial y cada uno entendía lo que debía hacer.

Una vez que entre al nivel medio superior y de ahí hasta actualmente en el trabajo, ya fue muy difícil que algún trabajo en equipo se pudiera hacer sin probelmas. Es más, ya no importaría si se desfasaba tanto la fecha de entrega, si no existiera gente tan idiota y que no supiera hacer las cosas, que no le interesaba o que no tratara de abusar de los demás tratando de ser lidercito que sólo quiere dar órdenes y que las cosas se hagan como por arte de magia… por los demás.

En la nueva área a la que fui asignado, hay un equipo que le habían dejado hacer unas gráficas que serían proyectadas en unos monitores y que servirían para toma de decisiones directivas informando la situación actual y tendencias. Se los habían dejado poco más de tres meses atrás y al llegar su fecha compromiso, hicieron algunas gráficas que se alimentaban de manera manual y la verdad sí estaban muy chafonas.

El director se enojó, no era práctico y además, la persona que se dedicaba a alimentar los datos de manera manual, siempre se equivocaba mostrando datos inconsistentes y nada fiables. Sólo porque eso es software y no se puede tocar, pero si hubiese sido papel, fue como si lo tomara, lo arrugara y lo echara a la basura frente a todos.

El equipo que formamos sólo fue de 3 personas. Y al presentarnos lo que teníamos que hacer en un tiempo menor a dos semanas, sabíamos que no debíamos perder el tiempo y deberíamos ponernos a trabajar. Al fin comprendí lo que era un verdadero trabajo en equipo, todos nos enfocamos en nuestras tareas y sabíamos lo que debíamos hacer casi sin comunicarlo y perder el tiempo en juntas y planeación* y mucho menos burocracia. Estuvimos tan bien coordinados y sin que hubiera un “líder” visible, que ese equipo serían envidiado por todos los que dan conferencias pedorras de liderazgo y trabajo en equipo.

Presentamos un muy buen trabajo y superamos las expectativas de todos, hasta las nuestras. La gente que iba a evaluar esto nos felicitaron, alagaron el software y no se dejó esperar la envidia de las demás áreas y de los demás la admiración del trabajo. Los jefes de las demás áreas mandaron a sus achichincles a preguntarnos cómo lo habíamos hecho para que trataran de hacer algo similar. Yo como defensor del software libre, les dije todo, pero sé que no harán tan buen trabajo porque carecen del equipo como el que hemos formado en ésta área

*Aclaro que no estoy en contra de la planeación. Creo que esa es la parte más importante de cualquier proyecto (eso y el Análisis). Solo que los lidercillos idiotas, al no saber del tema, quieren hacer la mayor cantidad de juntas tratando de que el conocimiento se les pegue y muchas veces sólo retrasan la verdadera planeación por creer en supuestos y no saber del tema. Finalmente entran a su salvación que es la burocracia.

domingo, febrero 26, 2012

Nueva área.

Ya está de más que explique el porqué de mi ausencia en el blog. De plano me doy pena por no poner ni siquiera un solo post en todo enero y solo hasta apenas ahorita a mediados de febrero. Me ha pasado que se me ha ocurrdio muchos temas para plasmarlos aquí, pero dentro de poco se me olvidan con la esperanza de que cuando tenga algo de tiempo, pueda escribir sobre eso.

Mi falta de tiempo se debe al trabajo. Muchos de mis compañeros comienzan a reir burlonamente porque entro muy temprano y salgo muy tarde, algo con el que siempre he estado en contra en los trabajos. La diferencia es que, si bien en el futuro trataré de evitar esta situación, lo hago y no me pesa tanto como en el área anterior. Ahora es resolver problemas y casi pura labor de diagnosis cuando llega un problema a los sistemas bancarios. La versión de sistemas de una sala de urgencias; han puesto a los mejores para poder realizar este trabajo además de manejar bien la presión que se siente al haber un problema grave.

En la anterior área podría llegar más temprano a casa aunque entrara más tarde. Ahora llego más tarde pero menos frustrado, y creo que esa sensación de frustración era la que me agotaba más física y mentalmente. A los demás les digo los beneficios que es trabajar nuevamente sin la pesada losa burocrática, pero creo que ya sus cerebros no asimilan un lugar dónde se trabaja bien sin burocracia.

martes, febrero 14, 2012